Por Valeria Sanchez Brizuela
En este artículo te
contamos sobre el método BLW - Baby Led Weaning que podría traducirse en: "destete dirigido
por el bebé".
Este método propone principalmente
empezar a introducir sólidos en trocitos a partir de los 6 meses, salteando la
etapa de las papillas.
¿En qué consiste? Fácil. Les
ofrecermos los alimentos en lugar de darles de comer, no hacemos avioncitos ni
malabares para que el bebé abra la boca y mucho menos les metemos la comida de
prepo, ni le enchufamos el chupete para que traguen al succionar.
BLW se trata justamente de confiar
en su autorregulación, confiar en que ellos van a saber qué y cuánto comer.
Para que esto suceda, la clave es la manera en la que les ofrecemos los alimentos
incluyendo ciertos hábitos o conductas, como hacer parte al bebé en la mesa
para que coma los mismos alimentos que comen mamá y papá (adaptados para ellos
en su preparación) y permitirle decidir la cantidad de lo que quiere comer
tomando el alimento con sus manos. El objetivo es (según los
impulsores) volver a un modo más natural de alimentación en el que el pequeño
tome decisiones en cuanto a qué y cuánto comer, y descubra por sí mismo las
texturas y colores de cada alimento.
Los niños aprenden por imitación
por lo tanto al ver a sus padres comer se les despierta el instinto de hacerlo
y copian. Otra de las ideas principales del BLW es que toda la familia se
siente a comer, al no tener que darles de comer en la boca cada porción, todos
pueden disfrutar de sentarse a comer en familia desde el primer momento
(siempre supervisando constantemente las conductas del bebé: movimientos,
deglución, todo).
Sin dudas, el método es práctico y
súper tentador desde muchos puntos de vista incluyendo la curiosidad y
experiencia que significan para los niñxs porque aprenden a disfrutar de las
texturas, sabores y aromonas de los alimentos que les ofrecemos. Dichos
alimentos, por supuesto deben ser saludables y en lo posible sin sal y con poco
aceite.
Por otro lado es importante
aclarar que la inclusión moderada y paulatina de los alimentos a la dieta de
los bebes no tiene porque desplazar el consumo de leche materna en los casos
que se produzca ya que la misma no solo nutre al bebé mucho más que cualquier
otro alimento, sino que además los protege de numerosas enfermedades, tales
como patologías gastrointestinales o respiratorias, incluso pasado el año de
edad. El objetivo fundamental
de esta etapa no es tanto nutricional sino educacional.
Es importante aclarar que no todos
los profesionales avalan este método, muchos lo toman como una alternativa
riesgosa ya sea por la falta de dentición o la posibilidad de atragantamiento,
entre otras. En lo personal, me gustaría agregar que siempre es importante
consultar con el pediatra y además tener presente siempre cada bebé es único,
por lo tanto puede funcionar perfecto en algunos casos y en otros no.
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