Los tres equipos continúan con sus respectivas participaciones en los torneos que organiza la Asociación del Fútbol Argentino. El de La Paternal, en su competencia en Primera División, es quien lleva de forma más tranquila su tránsito. El albo y el Carcelero, están más complicados.
El conjunto de Néstor Gorosito no logra despegar en la tabla de posiciones de un torneo altamente competitivo, y por eso buscó, en el delantero uruguayo Matías Fleítas, y en el volante Leandro “La Bomba” Navarro ese toque distintivo que le permita estar un poco más arriba en el certamen. Cabe recordar que durante el receso por la Copa América, cada equipo solo se pudo reforzar con dos jugadores. De todos modos, es rescatable que el “Bicho” esté alejado, por ahora, de la zona del descenso. Se puede ver, claramente, que la mayoría de los clubes que ascendieron en la última temporada, tienen dificultades para poder despegarse la “Zona caliente” de los promedios.
Quien sí está más complicado es All Boys, quien lucha por mantenerse en el Nacional B tras su catastrófico descenso hace casi un año. De todos modos, desde la llegada de José Romero a la dirección técnica (un histórico del club), el conjunto de Floresta levantó su rendimiento y obtuvo casi la mitad de los puntos, lo que le permite estar a la par en dicha contienda junto a Chacarita, Guaraní de Misiones, Sportivo Belgrano de Córdoba, y Central Córdoba de Santiago del Estero. Cabe recordar que el “Blanco y Negro”, antes del arribo del ex técnico de Ferrocarril Oeste, estaba hundido en el descenso directo con pocas expectativas de remontada.
Por su parte, Lamadrid no logra despegarse de la zona del descenso. Si bien tuvo una remontada significativa frente a Excursionistas, Cambaceres y Argentino de Quilmes, el conjunto de Villa Devoto no consigue cerrar la angustiante lucha por permanecer en la cuarta categoría del fútbol nacional. Y eso es producto de derrotas como la que tuvo frente a San Martín de Burzaco, en donde demostró un nivel futbolístico pobre, y muchas negligencias.
Para intentar terminar con esto, el Carcelero se reforzó con Marcelo Burzac y Pablo Barrionuevo. El primero es un importante enganche para la categoría surgido de River Plate, con paso por Sportivo Italiano (Ascendió a la B con dicho club) y por Fénix. El segundo es un delantero que proviene de Independiente de Chivilcoy, pero que también jugó en Ferrocarril Oeste.
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